Regreso de Nicaragua

Ya regresé de Nicaragua, y según veo las cosas no le conviene al mundo el hecho que yo viaje, talvez por eso las enfermedades y los problemas de los que Herberth ya habló aquí.

Estuve fuera del país 4 o 5 días y eso fue suficiente para que a mi regreso me de diera que se vino abajo la economía mundial, que se cayó la bolsa de valores (que aunque no se lo que signifique alguien debería levantarla y preguntarle si le duele algo), que los diputados se aumentaron más de $1500, y que son tan sin vergüenza que lo discuten muy alegremente para que todo El Salvador los vea por televisión.

En fin, cosas que ni me van ni me vienen.

Lo que si es duro es que gente incompetente se ha tomado el poder de la Universidad Nacional (Versión Occidente), que los del partido MAU ahora si emprenden su ofensiva contra la carrera de Letras. No solo despidieron a 2 docentes el ciclo anterior, ahora aparecen con el traslado del mejor catedrático que he conocido, con el nombramiento de gente incapaz y de muy poca disposición al diálogo como jefe del departamento, nos recortan el espacio físico del departamento, el cual, ya de por sí, estaba bastante pequeño. Y esto aclaro, ante la mirada de estudiantes que nada pueden hacer, pues el movimiento de oposición estudiantil quedó desarticulado después de las pasadas elecciones y luego de algunas amenazas de expulsión.

Hay nicaragua nicaragüita.

Por eso para no sentirme tan mal aquí les dejo mi poema preferido de la Leonesa (según yo, no según su acta de nacimiento) Alejandra Sequeira.

Invierno en Managua

Camila corta sus pies para no saltar los charcos:

El invierno

no ha sido como esperaba.

Pobre niña sin pies

Mutilada de ausencias vive

Y el invierno no es aún lo que esperaba.

El invierno levanta su falda y la lluvia cae verde.

Pobre niña sin pies

La soledad no le alcanza en los zapatos.